Un paisaje fabuloso con águilas pescadoras, patos salvajes y flamencos surcando los cielos, acompaña el recorrido de 48 km del terraplén con 46 puentes que conecta a Cayo Santa María con los apacibles y pintorescos pueblos de Remedios y Caibarién de tierra firme; saltando de cayuelo en cayuelo, cruzando las aguas límpidas del ecosistema de la Bahía de Buenavista (declarada Reserva de la Biosfera por la by UNESCO.
El cayo exhibe más de diez kilómetros de arenas finas perladas para luego develar una laguna espectacular y más allá el arrecife coralino en un mar que embelesa al veraneante con su rapsodia en azul.
El terraplén conecta a Cayo Santa María con otros islotes vecinos, tales como Las Brujas, Ensenachos, Cobos, Majá, Fragoso, Francés, Las Picúas y Español de Adentro, entre otros, y el sistema de canales entre los cayos forma un laberinto acuático de particular belleza que despierta el interés de los amantes al descanso o de las aventuras en contacto con la naturaleza por igual.
Este complejo de cerca de 720 km2 de islas, manglares costeros, playas cristalinas y arrecifes coralinos, es también el refugio de muchas especies de flora y fauna. Por todas partes hay vida silvestre en estado virgen, confiriéndole a la región un sello particular de belleza esencial, inocencia y encanto.
Ideal para la relajación, buceo con snorkel, pesca, deportes náuticos y más, este es realmente un espacio maravilloso para personas de todas las edades.
Familias, parejas o amigos encontrarán en este destino una gran opción para pasar su tiempo libre.
A los niños les encantará el ambiente existente. Excelente localidad para pasar el verano y muchas vacaciones más.