En Gibara, una ciudad de puerto pequeña pero muy pintoresca de la provincia de Holguín se encuentra el hotel Encanto Arsenita. Ocupa una antigua mansión de principios del siglo XX que ha sido magnifícamente restaurada y decorada con gran gusto para abrir sus puertas en el año 2015 como hotel boutique.
De hecho la palabra Encanto es el nombre de una bastante reciente marca de las cadenas hoteleras Cubanacán e Islazul que se caracteriza por hoteles pequeños que fueron un día la residencia de importantes familias durante la colonia, hoy hoteles boutique u "hotel de charme", como llaman los franceses este tipo de alojamiento, generalmente con personalidad y muy íntimos, de pocas habitaciones.
(Puede encontrarse también abreviada a una "E", colocada a la entrada de estos establecimientos e integrada al nombre del hotel: E Arsenita).
El hotel resulta muy atractivo, desde afuera y también dentro, donde soprende la excelente utilización del espacio, la decoración y mobiliario. Hay una pequeña recepción, sala de estar, y un bar-restaurante en la primera planta y una terraza-mirador que ofrece fabulosas vistas de la ciudad. La comida es correcta y el personal es profesional y muy atento, ansioso de asistir a los huéspedes.
Las 15 habitaciones son espaciosas, con altos techos, mobiliario de época, antiguos retratos de familia en las paredes, baños y aires acondicionados modernos. Además están impecablemente limpias y algunas poseen un balcón con vistas a la plaza e iglesia.
El hotel se encuentra prácticamente en la misma plaza principal de la ciudad, rodeada de hermosas casas coloniales y donde se aprecia una miniatura de la Estatua de la Libertad.
El centro histórico de la ciudad está tan bien preservado que fue declarado Monumento Nacional en el año 2003. Gibara, también conocida como "La villa blanca", tiene un agradable malecón (paseo marítimo), las gentes más amables y una gastronomía excelente, además de edificios arquitectónicamente importantes.
No hay tantísimo que hacer, excepto durante el Festival Internacional de Cine Pobre, pero si Ud. es el tipo de viajero que disfruta deambular por ciudades tranquilas con maravillosas casas coloniales, bonitas vistas del mar y las montañas además de muchos (y baratos) restaurantes, definitivamente apreciará este lugar.
También hay cuevas, y para los buzos, cuevas subterráneas que se pueden visitar con un guía.