Constituye el principal conjunto arquitectónico colonial de la ciudad y donde el visitante puede observar en la actualidad con el mejor grado de conservación las reminiscencias del pasado de la otrora Villa de Puerto Príncipe.
En ella se encuentran edificaciones igualmente muy antiguas como la Iglesia y el antiguo hospital, ambos consagrados a San Juan de Dios y por tal motivo denominados con el nombre de dicho santo. El Hospital de San Juan de Dios está muy ligado a la vida del Fray José Olallo Valdés; personaje destacado en la ciudad en el siglo XIX por sus servicios hacia los pobres de la comunidad por lo cual fue beatificado siendo el único santo católico ligado directamente a la isla de Cuba.